En 2009, el gobierno
finlandés implantó un modelo en el que habían trabajado en la universidad de
Turku, el programa Kika Koulu. Las primeras investigaciones apuntan a un
descenso del acoso escolar. Este modelo ya se ha puesto en marcha en más países(Italia,
Holanda, Estados Unidos…) y fue presentado en España en mayo por el Instituto
Iberoamericano de Finlandia, ya que muchos adolescentes que sufren acoso
escolar, no ven otra manera para dejar de ir al colegio. Algo está fallando. El ministerio de educación español acaba de sacar un borrador de un plan de convivencia que anunció ya en abril de 2016 y con escasa concreción del momento.
Lo más importantes es que el profesor se dé
cuenta de lo que ocurre en su aula y fuera de ella. Saber si hay alguien
excluido y no tienen amigos, y conocerlo un poco mejor. Y otro factor
importante, es la información a los padres. El proceso normal es el siguiente: cualquier cosa que se
detecte se comunica a la dirección, si es muy grave se hace una llamada a los padres
y si es muy grave, esta llamada es automática.
El acoso sucede en grupo, y
se resuelve en el grupo.
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